Tanto el pulido como el abrillantado de piedra son técnicas utilizadas para mejorar el aspecto y la textura de las superficies de piedra, pero difieren en su proceso, finalidad y resultados. He aquí un desglose:
1. Pulido
- Finalidad: El pulido se suele hacer para restaurar o refrescar el aspecto de una superficie de piedra, realzando su brillo y eliminando los arañazos superficiales o la opacidad.
- Proceso:
- Utiliza almohadillas abrasivas, compuestos de pulido o polvos de pulido aplicados con una pulidora de baja velocidad.
- Se centra en eliminar las imperfecciones finas y crear una superficie lisa.
- Resultado: Produce un acabado de satinado a semibrillante, según el tipo de piedra y los materiales de pulido.
- Aplicaciones: Se utiliza habitualmente como paso de mantenimiento para mantener piedras como el mármol, el granito y la caliza con un aspecto limpio y brillante sin volver a pulirlas por completo.
2. Pulido
- Finalidad: El pulido es un proceso más intensivo destinado a conseguir un acabado brillante y reflectante refinando la superficie de la piedra.
- Proceso:
- Implica el uso de abrasivos de diamante o polvos de pulido especiales aplicados en varias etapas, a menudo pasando del grano grueso al fino.
- Elimina arañazos más profundos, marcas o texturas irregulares para crear un acabado liso y brillante.
- Resultado: Proporciona un acabado de espejo de alto brillo que realza la belleza natural y los dibujos de la piedra.
- Aplicaciones: A menudo se utiliza durante la fabricación de nuevas superficies de piedra o grandes proyectos de restauración.
Diferencias clave
| Función | Pulido | Pulido |
|---|---|---|
| Intensidad | De ligero a moderado | Intensivo |
| Acabado | De satinado a semibrillante | Alto brillo, reflectante |
| Herramientas/Materiales | Almohadillas pulidoras, compuestos | Abrasivos diamantados, almohadillas de pulido |
| Propósito | Mantenimiento, pequeños retoques | Restauración, repintado profundo |
En resumen, el abrillantado consiste más en el mantenimiento de la superficie, mientras que el pulido consiste en conseguir un acabado casi perfecto y reflectante. La elección depende del estado de la piedra y del resultado deseado.
